ENCUENTRAN SUSTANCIAS EN EL CUERPO QUE CONTRIBUYEN A LA METÁSTASIS

Científicos del Cinvestav descubrieron que ciertas sustancias que el organismo produce como mecanismo de defensa contribuyen a que las células cancerígenas se propaguen a otras regiones, proceso conocido como metástasis.

El proyecto de la investigadora Isaura Meza encontró que la citocina pro-inflamatoria Interlucina1ß (IL-1ß) desencadena procesos químicos que ocasionan que las células cancerígenas se transformen y viajen por el torrente sanguíneo.

La estudiante de doctorado y miembro del equipo científico, Eloy Pérez Yepez, explicó que las células sanas se dividen, cumplen una función y con el paso del tiempo mueren, pero las cancerígenas pierden la capacidad de morir. Lo anterior es debido a que estas células dejan de hacer la función que les corresponde, debido a que su ADN se modificó por factores químicos, genéticos y ambientales, lo que provoca que se formen tumores.

Posteriormente, las células empiezan a desprenderse de esa masa tumoral adquiriendo cambios que les permitan sobrevivir y alojarse en otra parte del cuerpo donde generarán otros tumores, que es el proceso de metástasis.

Por ello, los tumores que son detectados en etapas tempranas tienen mejor pronóstico y el paciente puede vencer el cáncer, en contraste con la muerte del 95 por ciento de los enfermos en los que se propagan las células malignas.

Para la investigación, que inició en 2005, se extrajeron células de un tumor mamario, luego se cultivaron en el laboratorio y se analizó su comportamiento tras aplicarles sustancias que el cuerpo genera como defensa. Así se logró demostrar el papel de la Interlucina1ß en el desarrollo de la metástasis y con ello se pretende proponer que en el tratamiento del cáncer se incluya, además de los quimioterapéuticos, medicamentos antiinflamatorios que inhiban la producción de dicho componente para evitar la aparición de metástasis.

El resultado de la investigación, que también logró la clonación de células cancerígenas de tumor mamario en el laboratorio del Cinvestav, se publicó en la revista especializada Cancer Letters en septiembre de 2014.

Se espera que este descubrimiento contribuya a reducir las estadísticas de cáncer de mama en México, las cuales indican que es el padecimiento que más muertes provoca en las mujeres y el segundo tumor más frecuente entre este grupo poblacional.